La calle se ha transformado en una categoría sociopolítica evidente y explícita. Siempre ha sido así. La calle es el lugar que lleva a la plaza, a la sede social, a la cancha. Sitios de encuentros. La ciudad no se puede entender sin ese entramado que permite la circulación no sólo de personas, sino que también de bienes materiales y simbólicos. Las calles de Iquique, en los años 40, tenían el sonido del paso de animales que tiraban carretas. Los coches Victoria, solemnes con un señor cochero, que saludaba a quien se le cruzara por el camino. Olían a estiércol. La carroza fúnebre con un señor albino llamado Nino Leguatt, copito de nieve, le decían, tenía la ruta clara.

La expresión la calle es libre, sintetiza el ideal de la democracia. Es reclamada por evangélicos para predicar, por los niños para jugar, por los bailes religiosos para prepararse para La Tirana, por las comparsas para despedir el Carnaval, por la sociedad civil para expresar sus demandas. Hay calles de días y calles de noches. Cuando cae el sol, San Martín con Ramírez asume otra identidad. Otros pasos tal vez con tacones, besan el asfalto. Parafraseando al poeta, hay calles inocentes de día y culpables de noche.

Las calles tienen en su mayoría nombres de hombres. Obispo, generales, parlamentarios, líderes obreros. En Iquique no debe haber más de cinco con nombres de mujeres. Y no son calles centrales. Deportistas, artistas, luchadoras sociales. Hay muchas pero falta voluntad para el rebautizo. Las hermanas Gantt, Yolanda Zuzulich, Mafalda Schenoni, Teresa Flores, reclaman su lugar. La Timona, aunque personaje de ficción, tiene su lugar en la historia. Ni que hablar de la ilustre conferencista Belén de Sárraga. Las mujeres de Hospicio de los años 80, también se han ganado su lugar.

La democracia se juega y se baraja en la calle. La calle es su acta bautismal. La expresión «te falta calle» evidencia la importancia de este lugar. Estar en ella te otorga credenciales. Expresarse en lo público es hacer polis. Como la vieja consigna olvidada a veces: «el pueblo está en la calle haciendo la unidad».

Publicado en La Estrella de Iquique, el 8 de marzo de 2020, página 11