Jorge V

 

En Iquique están los clubes más antiguos de Chile. Yungay (1905), Maestranza (1905), Norteamérica (1910), Academia (1922), La Cruz (1923), Unión Morro (1923), Sportiva Italiana (1926), Jorge V (1926), Unión Pueblo Nuevo (1928), entre tantos otros como Estrella de Chile (1921). Todos ellos fundados en los primeros treinta años del siglo pasado. Muchos de ellos además practicaron béisbol, natación, entre otros deportes. En el boxeo, el Heriberto Rojas (1921), Manuel Sánchez (1922) y Unión Matadero (1935), son los responsables de producir tremendos peloduros.

Lo anterior señalaba la centralidad que tenía el deporte en nuestra ciudad. Iquique no se podía entender sin esas organizaciones que hacían posible nuestra más preciada seña de identidad: Tierra de Campeones.

Jorge V, fue uno de esos clubes que tanto en fútbol como en básquetbol animaron la vida social y deportiva. Produjo grandes basquetbolistas como los hermanos Cordero y a fines del siglo pasado a Patricio Arroyo. Pero también aportó al futbol, tal vez Juan Manuel Acuña fue uno de los más brillantes que jugó en el profesionalismo por Audax Italiano y Green Cross, además de Campeón Absoluto, por Iquique, el año 1943.

Ignoro cuando dejó el balompié y se dedicó exclusivamente al baloncesto. No se tampoco porque se llaman como se llaman. Lo cierto es que ocupan un lugar preferencial en el paisaje urbano y en la memoria deportiva.

No es fácil, lo sabemos, mantener en vigencia a este tipo de instituciones, pero los de la calle Barros Arana, se la han arreglado para derrotar a su gran rival: el olvido. La actual dirigencia con ilustres apellidos como Pérez, Soto, han hecho casi un apostolado para insistir en el basquetbol como un deporte hermoso que le dio a Chile figuras olímpicas que ninguna otra ciudad ha dado. Los hermanos Cordero, son el mejor ejemplo de ello. Lalo Cordero, jugando por Valparaíso nos ganó esa tarde del año 1943 en el Castro Ramos silenciado a los iquiqueños que no lo podían creer. Pero en fin.

Los del Jorge V tienen motivos de sobra para enorgullecerse de su club. Y lo anterior lo obliga a seguir construyendo esa tradición casi centenaria. Las hermanas del Valle y el viejo Manuel Morales, entre tantos otros, pueden sentirse tranquilos. La sangre del Jorge V, sigue corriendo por la nuevas generaciones.

Publicado en La Estrella de Iquique, el 24 de enero de 2016.

En la foto, entre otros, los hermanos Alaniz, Carlos González.